El predominio de la lengua inglesa

Los sitios web, las redes sociales, las propagandas y las novelas en lengua inglesa ejercen una influencia importante en todo el mundo. Siendo la lengua más hablada, con más de 1500 millones de hablantes en el mundo, el inglés se considera la lengua franca del comercio internacional, de la ciencia, de la investigación y de muchos ámbitos más. La lengua ha establecido un predominio mundial sin precedentes.

¿Pero por qué la lengua inglesa se habla en todo el mundo? A continuación, veremos cómo la lengua inglesa alcanzó su estatus como lengua predominante y la influencia que ejerce hoy en día.

El inglés y el imperio británico

La lengua inglesa no siempre gozó de prestigio. Sus orígenes se remontan a la lengua anglosajona (también llamada inglés antiguo) y a la variedad normanda del francés antiguo, introducida en la isla tras la invasión de Guillermo el Conquistador en 1066. La lengua de los conquistadores normandos se impuso como la lengua de la corte y de la aristocracia en Inglaterra, y, por eso, durante los tres siglos siguientes, se filtraron miles de vocablos de origen francés en el habla de la gente común.

Sin embargo, más adelante, la lengua inglesa prosperó. Cobró un mejor estatus y, a fines del siglo XIV fue adoptada por la corte. Y, durante la expansión del imperio británico, entre los siglos XVII y XIX, se expandió por el mundo entero para convertirse en la lengua predominante.

En 1920, en su máxima expansión, el imperio británico comprendía una cuarta parte de la superficie de la Tierra. La influencia de Londres en el comercio mundial impulsó el uso del inglés más allá de los territorios británicos. Hablar inglés pasó a ser una herramienta importante para el comercio y, en algunos lugares, se impuso por encima de las lenguas locales, especialmente en el continente africano.

A mediados del siglo XX, tras el declive de Reino Unido, Estados Unidos ascendió como primera potencia económica mundial. Este cambio cementó el prestigio de la lengua inglesa, tal y como la conocemos hoy, en el comercio internacional, en la tecnología y en las industrias.

Predominio del inglés en el mundo

Hoy en día, la lengua inglesa se usa en las más prestigiosas revistas científicas y es lengua oficial en 67 países. En todo el mundo, el inglés se enseña en los colegios y se usa en el ámbito laboral. Por ejemplo, en Europa, casi un 100 % de los estudiantes aprenden en inglés en alguna etapa de su escolaridad. La lengua se ha convertido en un símbolo de estatus que sirve para conseguir oportunidades económicas y académicas, mejores ingresos y mucho más.

Si bien el inglés contiene un gran número de vocablos provenientes de otras lenguas, hoy en día, son las demás lenguas quienes adquieren préstamos del inglés. Esto sucede especialmente con el argot estadounidense, con las marcas y con las nuevas tecnologías. En Francia, a pesar de la lucha por erradicar los anglicismos de la lengua, vocablos ingleses como selfie [autofoto], o incluso Bitcoin, son de uso cotidiano. En 2021, cringe [vergüenza ajena] fue votada como palabra del año en Alemania.

El lado oscuro del predominio de la lengua inglesa

Mientras que el inglés ofrece muchos beneficios, el predominio de una lengua también puede ser perjudicial: algunos estudiosos denominan la difusión del inglés en el mundo como imperialismo lingüístico.

No podemos olvidar que la difusión de esta lengua vino de la mano de la conquista, del colonialismo, del comercio de personas esclavizadas, etc. También cabe mencionar la discriminación que pueden sufrir las personas que no hablan la lengua predominante. Al mismo tiempo que la ONU inaugura la Década Internacional de las Lenguas Indígenas, por ejemplo, es difícil olvidar que, en los siglos XIX y XX, países como Estados Unidos tomaban medidas para minorizar las lenguas indígenas.

La homogenización de la cultura presenta un desafío único para los traductores. No solo deben conocer los significados de vocablos ingleses, sino que también deben tener en cuenta que pueden tener distintos significados como préstamos en otras lenguas. A la hora de trabajar con lenguas extranjeras, es fundamental contratar traductores profesionales que sean lingüistas expertos y que tengan suficiente conocimiento cultural como para realizar las traducciones más delicadas.

Foto de Clarissa Watson en Unsplash